Este viernes 15 de julio comienza el tan esperado Campeonato Mundial de Atletismo de Oregon 22 en el mítico y al mismo tiempo renovado Hayward Field, la meca del atletismo tal y como lo conocemos. Habrá más de 1900 atletas de 192 países, que competirán desde el 15 y hasta el 24 de julio. Desde 2019 que no tenemos un Mundial, ya que Tokio, que originalmente estaba pautado para agosto del 2020, tuvo que posponerse un año debido a la pandemia, y eso obligó a extender por un año más la espera mundialista. De los 43 ganadores individuales de Doha 2019, 37 defenderán sus títulos en Oregon, y también estarán en acción 42 medallistas de oro individuales de los Juegos Olímpicos del año pasado en Tokio.

Cinco claves del campeonato
- Etiopía vs. Kenia
Una de las centralidades de cualquier campeonato del mundo o J.J.O.O en los últimos tiempos es la batalla por el medallero entre las dos potencias del atletismo, Kenia y Etiopía. Este año no será la excepción, aunque ambos equipos llegan con algunas sorpresas y se invirtieron las predicciones. En eventos donde tradicionalmente Kenia era dominador, los etíopes han recuperado terreno y viceversa. Los 5000m masculinos son un ejemplo: ahí el equipo keniata, que históricamente presentó supremacía, cuenta con un equipo más corto pero no con pocas posibilidades serias de medalla entre la armada etíope de Selemon Barega, Berihu Aregawi y Yomif Kejelcha. Jacob Kprop y Nicholas Kipkorir tienen las mejores marcas del startlist (12:46), aunque en Tefera, Aregawi y Barega radica la experiencia: entre todos se reparten medallas olímpicas, mundiales y títulos de Diamond League. Kejelcha, que era uno de los mejores prospectos del fondo mundial hace algunos años, cedió en este último tiempo pero parece estar de nuevo en su mejor forma luego de establecer un 12:52 este año. En los 1500m femeninos también habrá estelaridad de las africanas, con la medallista olímpica etíope Gudaf Tsegay dispuesta a batallar con la leyenda keniata Faith Kipyegon, última campeona olímpica, tanto en Río como en Tokio. Tsegay estaba inscripta también en los 5000m, pero finalmente se decantó por la prueba de mediofondo. Exceptuando a Jakob Ingebrigtsen de un podio casi seguro, en los 1500m masculinos el keniata Abel Kipsang tendrá un mano a mano espectacular con el etíope Samuel Tefera, que también se bajó de los 5000m para centrarse en esa prueba. Kipsang tiene la mejor marca del año, pero Tefera tiene la experiencia y viene de ser el campeón mundial bajo techo. Tampoco habrá que descartar a otro keniata, Timothy Cheruiyot, que viene diluido este año pero cuenta con suficiente palmarés para darles pelea. En los 10.000m, el equipo etíope recuperó su histórico músculo en esa prueba y tiene allí a cuatro de las mejores marcas del año: Selemon Barega (26:44.73), Tadese Worku (26:45.91) y Berihu Aregawi (26:46.13). Sólo resta ver cómo influye el desgaste de Barega y Aregawi en caso de que decidan doblar pruebas. En otro evento con historial de dominación keniata, los 3000m con obstáculos, también habrá duelos interesantes. El keniata Conselsus Kipruto, que otrora fue rey en la distancia, este año cedió protagonismo frente al campeón olímpico marroquí Soufiane El Bakkali y frente al etíope Lamecha Girma, que viene de un par de victorias resonantes en Diamond League.

- Récords mundiales
Los Campeonatos Mundiales, así como los J.J.O.O., suelen entregar muchas emociones, finales infartantes y actuaciones estratégicas. Con la discusión por los clavos y las zapatillas y la era del carbono ya instalada en el atletismo, el año pasado en Tokio vimos algunas actuaciones osadas, como la de Jakob Ingebrigtsen, que imprimió un nuevo récord olímpico en los 1500m, una prueba por demás estratégica. Lo mismo hicieron el lanzador de peso Ryan Crouser y también Sydney McLaughlin, que hace un par de semanas en los USATF Outdoors pulverizó por tercera vez su propio récord mundial en los 400m con vallas y se convirtió en la primera atleta de la historia en firmar récords mundiales en tres finales consecutivas: Trials Olímpicos Tokio 2020, Final en Tokio 2020 y Nacionales USATF. El sueco Armand Duplantis, la máxima estrella de la garrocha desde Sergey Bubka, acaba de saltar 6.16 al aire libre en Estocolmo y todo parece indicar que en Oregon, un lugar que conoce bien desde sus épocas de universitario para LSU, puede hacerlo de nuevo. El estadounidense Grant Holloway, que ya tiene el récord del mundo en los 60m con vallas, es una incógnita para batirlo en los 110m c/v, aunque le pongo mis fichas a Devon Allen, un ex duck precisamente de la Universidad de Oregon que luego del mundial se despedirá del atletismo al menos por un tiempo para empezar su aventura como Wide Receiver en los Eagles de Philadelphia, en la NFL. En el mediofondo femenino, también le pongo un pleno a Gudaf Tsegay para batir, cuanto menos, el récord de mundiales en los 1500m femeninos, lo mismo que Berihu Aregawi en los 5000m (por sus últimas actuaciones, es complicado prever que el ugandés Joshua Cheptegei, que posee el récord mundial, pueda volver a batirlo). ¿Y los 400m? Shauane Miller-Uibo tiene todas las de ganar, pero está lejos de los 47.6 de la alemana Marita Koch. En el campo masculino, Michael Norman, que metió la cuarta mejor marca all-time (43.45) hace algunas semanas en Mt. Sac, puede soñar con quebrar las 43.03 de Wayde Van Niekerk, que también estará presente en el evento. En los 100m femeninos el récord mundial de Florence Griffith-Joyner está en vilo en los últimos años, al acecho de Elaine Thompson-Herah y Shelly Ann Fraser-Pryce. ¿Será Eugene, en el país que vio nacer a FloJo, el lugar para un nuevo WR en esa distancia?

- Velocidad: qué puede pasar
Desde Usain Bolt que la velocidad masculina quedó huérfana y busca arroparse en alguna figura, entre las que emergen (Erriyon Knighton) y las más experimentadas. Tanto en los 100 como en los 200m, el panorama de estos mundiales parece estar bastante claro, a la espera de alguna actuación descollante. Marcell Lamont Jacobs, que apenas corrió 9.99 este año y viene de distintos malestares entre ellos una lesión, parece vulnerable en especial para el estadounidense Fred Kerley, una ex estrella de Texas A&M que desde que se sumó al profesionalismo no paró de crecer y es uno de los pocos atletas en haber bajado de los 10” en los 100m, de 20” en los 200 y de los 44” en los 400m. Kerley tiene suficientes cartas para batirse a duelo con el italiano: fue medallista olímpico en Tokio (precisamente, detrás de Jacobs) y viene de una temporada rutilante, con victoria en los USATF Outdoors y grandes apariciones internacionales este año. Habrá tercero y cuarto en discordia, con el campeón mundial de Doha 2019 Christian Coleman, que viene de superar una condena por presunción de dopaje (los periodistas norteamericanos omiten esto, sorpresivamente) y Trayvon Bromell, el que mejor registro tiene de todos los aspirantes, y que parece estar en forma nuevamente.
En los 100m femeninos, la medalla de oro viajará hasta Jamaica y está segura entre la doble campeona olímpica Elaine Thompson-Herah y otra leyenda, Shelly Ann Fraser-Pryce, también campeona olímpica y mundialista. Entre ambas, la que mejor llega es Fraser-Pryce, que tiene la mejor marca mundial del año (10.67). Herah mostró algunas dudas hace un par de fines de semana en los trials jamaiquinos, pero estamos seguros de que cómo una y otra vez el viernes comenzará otro capítulo de su dominio. La tercera jamaiquina que aspirará a colarse entre ambas es Shericka Jackson, bronce olímpico y ganadora precisamente de los trials, que llega al parecer en un pico de forma después de sus 10.77 en esa cita.
En los 200m masculinos se concentrará uno de los duelos del campeonato capaz de convertir a este mundial en el prólogo de una gran rivalidad del deporte: Noah Lyles vs. Erriyon Knighton, experiencia frente a juventud. Lyles, que viene de ser campeón nacional estadounidense, es además medallista olímpico de bronce, mientras que Knighton, que apenas tiene 18 años y saltó desde la escuela secundaria directo al profesionalismo, impactó al mundo del deporte hace algunos meses corriendo en 19.49 para anotarse cuarto en la lista de mejores marcas de todos los tiempos, tabla que lidera, por supuesto, Bolt. Otros contendientes que buscan meterse son el medallista dorado canadiense André De Grasse, que no viene de su mejor temporada, y el propio Fred Kerley. En la carrera femenina, las jamaiquinas no tienen el panorama tan allanado luego de la aparición de la estudiante de la Universidad de Kentucky, Abby Steiner, que viene de imprimir las dos mejores marcas del año (en la final fue de 21.77) durante los USATF Outdoor.

En el campo masculino de los 400m todo parece estar dado para que Michael Norman, que no pudo demostrar todo su potencial el año pasado en Tokio, finalmente maraville al mundo, y no me extrañaría que lo hiciera con un registro cercano al récord mundial: Tiene la mejor marca del año con 43.56 apenas deslizándose en los últimos metros. Sin el campeón olímpico bahameño Steven Gardiner, que anunció su baja en el mundial por una lesión en el aquiles, el camino está allanado para el estadounidense, aunque habrá que ver qué pueden hacer el granadeño Kirani James y el propio recordman mundial, Wayde Van Niekerk. Entre las mujeres, nada hace sospechar que Shauane Miller-Uibo, que no pierde una carrera de 400m desde el mundial de 2019 (frente a la desaparecida Salwa Eid Naser, que no estará en Eugene por dopaje) pierda esta carrera. Es la doble campeona olímpica y actual campeona mundial indoor.
- El atletismo que le gusta a la gente
Una cosa está asegurada en esta previa de Eugene 2022: habrá showtime. Nadie mejor que los estadounidenses para organizar un evento de tal magnitud, en un estadio que tiene carácter de mito pero que al mismo tiempo luce como un estadio con las comodidades de la NFL, en un momento en donde estrellas como el campeón olímpico y europeo Jakob Ingebrigtsen llegan consagradas y otras, como el propio Erriyon Knighton (del que hablamos en otro párrafo), emergen. Hablando de Jakob, a pesar de ser indiscutidamente el mejor millero del mundo desde Tokio, esta temporada tuvo algunos altibajos, principalmente por cuestiones mentales (la salida de su padre Gjert del equipo) y por COVID, con pocas competencias en su calendario. Al mismo tiempo, los australianos Stevie McSweyn y Ollie Hoare llegan muy fuerte, ni qué mencionar a los keniatas, de los que hablamos en el párrafo anterior. La velocidad, garante siempre de los grandes espectáculos del atletismo, está lista para comenzar a dar pistas certeras sobre el futuro post era Bolt, además del binomio Herah-Fraser, que siempre brindan un show aparte.

Los norteamericanos tendrán su primetime con figuras como Sydney McLaughlin y Athing Mu, mientras que otros atletas de clase mundial como la triple medallista olímpica en Tokio Sifan Hassan, que también vivió y compitió durante mucho tiempo en Estados Unidos, le darán el contexto a un mundial que promete. Los africanos pondrán a sus mejores hombres y a sus mejores mujeres en la cita, desde los ugandeses Joshua Cheptegei, Jacob Kiplimo o Peruth Chemutai a las keniatas y etíopes ya mencionadas más arriba. El maratón, la frutilla del postre mundialista, también tendrá a los etíopes y keniatas como figuras principales, tipos con experiencia como el campeón mundial Lelisa Desisa o Mosinet Geremew, mezcladas con ganadores de majors como Geoffrey Kamworor y Lawrence Cherono. Entre las mujeres, habrá dos atletas por debajo de las 2:18, un símbolo de la excelencia del maratón femenino. La keniata y campeona mundial de Doha, Ruth Chepngetich y la etíope Ashete Bekere, aunque también estará la keniata nacionalizada israelí Lornah Salpeter, famosa por ser una de las animadoras del maratón de Tokio hasta el kilómetro 35. Una de las corredoras más famosas de Estados Unidos en el último tiempo gracias a su historia prácticamente como aficionada y a su récord nacional, Keira D’Amato, se unirá a otra figura muy conocida como Sara Hall. En el salto en alto los flashes estarán con el italiano Gianmarco Tamberi y Mutaz Barshim, que brindaron una exhibición aparte en Tokio, así como también en la ucraniana, campeona mundial indoor, Yaroslava Mahuchik, que en los últimos meses sobresalió por sus actuaciones pero también por la guerra en su país.

- La presión sobre el equipo estadounidense y las posibilidades de los latinoamericanos
Latinoamérica volverá a un campeonato mundial con algunas certezas entre sus equipos, especialmente por una medalla segura, la del brasileño Allison Dos Santos en los 400m con vallas (sin Karsten Warholm, lesionado y con un único oponente en el estadounidenses Rai Benjamin) y otra probable, también de un brasilero, Darlan Romani en los lanzamientos de peso, que puede colarse entre Ryan Crouser y Joe Kovacs. En el maratón masculino Daniel Do Nascimento, también del Brasil, fue una de las sensaciones del año al correr en 1:04:50 para establecer la plusmarca continental y aunque parece difícil que pueda meterse entre los africanos, en una carrera desnivelada y con calor nadie puede predecir nada. Otro compatriota, Thiago Braz, campeón olímpico en Río 2016, siempre tiene chances en la garrocha. Entre los argentinos, precisamente en ese campo es en donde está uno de los mejores representantes de nuestro país, el histórico German Chiaraviglio, que viene de saltar 5.70 en Alemania al aire libre. No le será suficiente para una medalla sobre todo en un evento en donde está Mondo Duplantis, pero una final olímpica es probable para él. Entre las mujeres, las argentinas Florencia Borelli (5000m) y Belen Casetta (3000m con obstáculos) vienen de una gran temporada, sobre todo Borelli, que bajó su mejor registro personal en la Continental Gold Tour de Manchester. En una serie no tan rápida, Borelli puede aspirar tranquilamente a una final. Casetta, por su parte, tiene experiencia en estar en la cita final y buscará también su mejor versión, en un evento que contará también con la presencia de Carolina Lozano, que viene de una muy buena temporada al aire libre. En lanzamiento de martillo, Joaquin Gómez es una esperanza de buen torneo y una final olímpica también es posible, al igual que Carlos Layoy, que buscará su mejor papel en el Mundial en la prueba de salto en alto. Entre las medallas seguras para nuestro subcontinente estaba la de Yulimar Rojas, que increíblemente se quedó afuera de Eugene por un problema reglamentario en sus zapatillas. Aún así, la colombiana Catherine Ibargüen puede relevarla en el podio.
En cuanto al equipo estadounidense, es probable que nunca en la historia haya llegado tan fuerte como este año a una cita mundialista. Con un puñado de atletas de fuste en casi todos los eventos, las medallas seguras para el team local están en los 400m con vallas, lógicamente por Sydney McLaughlin y también por Dalilah Muhammad, aunque Femke Bol querrá traerle sobre todo a McLaughlin algún sobresalto. En las carreras de fondo, los Bowerman Karissa Schweizer y Grant Fisher son los más experimentados y pueden pelear una medalla, sobre todo porque tienen las mejores marcas mundiales del año (en el caso de Fisher, con récord estadounidense), aunque no descartaría, por experiencia y por vigencia a Emily Infeld. En el lanzamiento de peso Ryan Crouser es número puesto, al igual que Kovacs (después se verá el orden). En los 3000m con obstáculos, una fuerte Emma Coburn ya demostró tanto en Río como en Londres que puede subirse al podio, ni que hablar de la última medallista de plata olímpica, Courtney Frerichs. El caso de los 800m también es una fija para el equipo de ese país, con Athing Mu en modo GOAT desde Tokio y Ajee Wilson, que recuperó sus mejores días y viene de lograr su mejor marca bajando de 1:58 en un duelo infartante hasta el final con Mu. En los 100m con vallas, Kendra Harrison también paga menos para una medalla seguro, y en el campo de la velocidad, como dijimos más arriba, Fred Kerley, Trayvon Bromell y Christian Coleman son las estrellas de ese campo. Sin Sha’Carri Richardson, que hasta ahora falló en los dos certámenes más importantes (en Tokio por una suspensión de marihuana y en Eugene porque no pasó la clasificación), las chances del equipo se reducen. En los 110m con vallas, tampoco el orden altera el resultado para el equipo, con Grant Holloway dominante y Devon Allen soplándole la nuca.

Calendario Oregon 22’
Nuestro columnista invitado Lucas Cerri armó el calendario completo, día por día, que podes descargar en este enlace.
